Si eres de las personas que disfruta del jamón ibérico pata negra estamos seguro que este artículo es para ti. A continuación Bankers Club presenta 10 curiosidades de este delicioso plato:
- El cerdo de tronco ibérico es una raza autóctona y exclusiva de la península ibérica. Lo que hoy conocemos como cerdo ibérico es el resultado del cruce del jabalí autóctono con el cerdo que llegó a España en barcos fenicios.
- Fue el Imperio Romano quien popularizó el jamón curado utilizando la sal como método de conserva, sin embargo, hay evidencias de su consumo por parte de los pueblos prerromanos; íberos, celtas y antiguos pobladores de la península.
- No es lo mismo pata negra que jamón ibérico. Un jamón ibérico no tiene que ser obligatoriamente de color negro. La expresión “pata negra” hace referencia al color de la pezuña, aunque la mayoría de los jamones ibéricos suelen ser de pezuña negra.
- Es conocido como jamón ibérico de bellota debido a que estos cerdos son alimentados con bellotas y hierbas naturales.
- La curación mínima de los jamones ibéricos de bellota de máxima calidad es de 30 meses. En las paletas de bellota la curación mínima es de 20 meses. Aunque hay que enfatizar en que la estancia óptima en bodega de cada pieza depende también del peso.
- El jamón ibérico de bellota es muy beneficioso para la salud debido a su grasa que contiene más del 55% de ácido oleico. Estas grasas producen un efecto beneficioso sobre el colesterolen sangre, propiciando un incremento de la tasa del colesterol beneficioso y reduciendo la tasa del colesterol perjudicial.
- Los puntitos blancos que aparecen en el jamón ibérico de bellota son una señal de buena calidad, muestra cristalizaciones formadas fundamentalmente por un aminoácido denominado tiroxina, que aparece durante la maduración de las proteínas.
- El cerdo ibérico pata negra tiene una capacidad única de infiltración de la grasa que no está presente en otras razas o en cerdos con otro tipo de alimentación.
- El jamón ibérico es inconcebible sin el tocino, el principal artífice del sabor y el olor único e inconfundible del mejor jamón. La grasa otorga palatabilidad a la pieza, siendo el nutriente líder en proporcionar sabor a los alimentos.
- Debes sacar del frigorífico al menos 60 minutos antes los sobres de jamón envasados al vacío que vayas a degustar. Para apreciar el sabor y el aroma del jamón es indispensable consumirlo a temperatura ambiente y con su maridaje perfecto: vinos tintos sometidos a envejecimiento, de taninos pulidos donde la madera no sea excesivamente protagonista y a su vez se disponga de buena acidez para limpiar la grasa del jamón.