Francesca Petrilli jamás olvidará cuando una maestra, en la academia donde estudió una especialidad en elaboración de pastas en Italia, le dijo “no sirves para la cocina, no te dediques a esto”. Hoy lo recuerda entre risas, porque  luego de poco más de tres años ha podido levantar su emprendimiento de pastas artesanales en Guayaquil llamado Di Simona Pastas, que produce cerca de 156 kilos al mes. Lo que comenzó como un hobby para Francesca, hoy se ha convertido en un producto culinario artesanal de alto nivel con varios puntos de venta en la ciudad. Este mes, Stéphane Richard ha creado un Festival de Pastas, en el que elaborará sus platos utilizando la pasta fresca de Francesca. 

Mientras estudiaba Finanzas en Italia, Francesca reforzó el amor que tenía hacia la pasta. Su familia tiene origen italiano, pero ella creció en Ecuador. Recuerda que su nonno era un ávido cocinero, y las pastas no faltaban en las reuniones familiares. A Francesca jamás le llamó la atención cocinar, pero una vez instalada en el país mediterráneo, comenzó a explorar las distintas opciones de pasta fresca para prepararse sus propias comidas y sentirse como en casa. Fue ahí que se enamoró de la cocina italiana y decidió estudiar cómo hacer la misma pasta, desde cero, de la que se había enamorado.

Francesca notó que existía un vacío en el mercado guayaquileño en cuanto a pastas. Cuando regresó a Ecuador supo que ella tenía que llenar ese vacío. En el país lo común y popular es encontrar la pasta de cartón, o como se llama realmente, la pasta seca. Sin embargo no existe mayor oferta de pasta fresca, como la que ella compraba en Italia con frecuencia, para preparar en casa. La pasta fresca además es más saludable porque en el relleno se incluyen otro tipo de alimentos como espinacas, pollo, carne. Las opciones son infinitas y complementan a la harina de trigo con sémola de maíz. Francesca ofrece variaciones de pastas muy tradicionales de Italia, y rellena a sus raviolis, por ejemplo, con prosciutto y pera, o con queso de cabra -combinaciones mediterráneas que siempre son ganadoras.

Empezar con Di Simona Pastas no fue una tarea fácil. La mayor dificultad al principio fue que los ingredientes difieren mucho entre Italia y Ecuador. Francesca tuvo que experimentar una y otra vez para poder adaptar sus raviolis al clima húmedo de guayaquil, y lograr la textura adecuada. “No me salía la pasta igual de perfecta, aun cuando utilizaba la misma receta con la que la preparaba allá. Me demoré unos tres meses en experimentar, pero finalmente lo logré”. Comer la pasta que prepara Francesca, es probar la verdadera pasta italiana al dente. Además sabrosa, es preparada con técnica italiana utilizando ingredientes de calidad. al dente. Además sabrosa, es preparada con técnica italiana utilizando ingredientes de calidad.

Para Francesca trabajar con el chef ejecutivo del Bankers Club, Stéphane Richard, ha sido una experiencia muy gratificante. Le recuerda mucho a uno de sus profesores más queridos en su academia en Italia. Han tenido buena química, y Stephane utilizará la pasta de Di Simona para el festival de este mes en el Bankers Club. Los socios se podrán deleitar de platos como Ravioli de tomate seco con salsa de pistachos, tagliatelle de chocolate en salsa de nibs con crema de leche, ravioles de prosciutto y pera con salsa alfredo, y muchos más. El Festival de Pastas estará formado por 13 platos distintos y durará desde el 10 al 23 de septiembre.